Un niño abordó un avión para viajar a Nueva York,llamando la atención de tod@s, sube al avión con boleto en mano, busca su asiento y se sentó al lado mío. Se veía un niño educado, seguro e inteligente. Me miró, sonrió, sacó un libro y comenzó a dibujar, pintar y colorear. A pesar de su corta edad, acaso unos 8 años, no presentaba rasgos de ansiedad ni nerviosismo al despegar el avión. El vuelo no fue muy bueno, hubo tormenta y mucha turbulencia.
De momento una sacudida fuerte, y todos estaban muy nerviosos, pero el niño mantuvo su calma y serenidad en todo momento
¿Cómo lo hacía?, ¿Por qué su calma?...
Hasta que una mujer frenética le preguntó
;- Niño:¿no tienes miedo?
- "No señora”, contestó el niño y mirando su libro de pintar le dice:
- ”Mi padre es el piloto”...
A lo largo del camino nos vamos a encontrar con sucesos que nos sacudan como en una turbulencia. Habrá momentos en los que no veremos el terreno sólido y nuestros pies no pisarán lugar seguro. No veremos dónde sostenernos, estaremos inseguros.
En esos tiempos hay que recordar que nuestro PADRE es el piloto.
A pesar de las circunstancias, nuestras vidas están puestas en el creador.Así que la próxima vez que llegue una tormenta a tu vida o si en este momento estás pasando por una, alza tu mirada al cielo, CONFÍA y di para ti mism@:
¡¡Mi Padre es el piloto!!!.
Gracias Dios por bendecirme mucho más de lo que merezco.
Todos los días tenemos algo por lo que dar gracias a Dios, aunque a veces sea difícil verlo. A veces las bendiciones vienen disfrazadas de problemas, demos gracias por las bendiciones y por las pruebas. Aquí hay algunas frases para agradecer a Dios. Cada minuto es un regalo de él, sin importar la religión a la que pertenezcamos, Él estará ahí para todas nuestras necesidades.
Te extraño. Aunque no te lo diga; te quiero.
Aunque no llore; me duele. Aunque no te hable; te pienso. Aunque no te busque; te extraño. Aunque no te lo diga; te quiero.
Un amigo es aquel a quien no necesitas darle las gracias...
Un amigo es aquel a quien no necesitas darle las gracias... pero recuerda decirle de cuando en cuando, te quiero
No confundas mi personalidad con mi actitud.
No confundas mi personalidad con mi actitud. Mi personalidad es quién soy y mi actitud depende de ti.
Se enamora con acciones, se besa con sentimiento, se abraza con cariño..
Se enamora con acciones, se besa con sentimiento, se abraza con cariño, se piensa con el corazón y se ama con el alma.
Solo quien te quiere de verdad comprende el dolor detrás de tu sonrisa..
Solo quien te quiere de verdad comprende el dolor detrás de tu sonrisa, el amor detrás de tu rabia y las razones detrás de tus silencios
Dios siempre tiene algo para ti, una llave para cada problema..
Dios siempre tiene algo para ti, una llave para cada problema, luz en cada sombra, alivio para todas las penas y un plan para cada mañana
Cada dolor te hace más fuerte, cada traición más inteligente.
Cada dolor te hace más fuerte, cada traición más inteligente, cada desilusión más hábil y cada experiencia más sabio.
Dios siempre tiene algo para ti, una llave para cada problema
Dios siempre tiene algo para ti, una llave para cada problema, luz en cada sombra, alivio para todas las penas y un plan para cada mañana
No valores a quien nunca vio lo mejor en ti.
No valores a quien nunca vio lo mejor en ti; ni esperes que un día se arrepienta, tal vez ni eso pase.
Un amigo es aquel a quien no necesitas darle las gracias...
Un amigo es aquel a quien no necesitas darle las gracias... pero recuerda decirle de cuando en cuando, te quiero
"La felicidad no depende de lo que nos falta, sino del buen uso que hacemos de lo que tenemos"
TU MAYOR TESORO
Cuentan que una vez un hombre caminaba por la playa en una noche de luna llena. Pensaba de esta forma:
"Si tuviera un auto nuevo, sería feliz"
"Si tuviera una casa grande, sería feliz"
"Si tuviera un... excelente trabajo, sería feliz"
"Si tuviera pareja perfecta, sería feliz".
En ese momento, tropezó con una bolsita llena de piedras y empezó a tirarlas una por una al mar cada vez que decía: "Seria feliz si tuviera....".
Así lo hizo hasta que solamente quedaba una piedrita en la bolsa, la cual guardó. Al llegar a su casa se dio cuenta de que aquella piedrita era un diamante muy valioso.
¿Te imaginas cuántos diamantes arrojó al mar sin detenerse y apreciarlos?
Cuántos de nosotros pasamos arrojando nuestros preciosos tesoros por estar esperando lo que creemos perfecto o soñando y deseando lo que no se tiene, sin darle valor a lo que tenemos cerca.
Mira a tu alrededor y si te detienes a observar, te darás cuenta cuán afortunado eres, muy cerca de ti está tu felicidad, y no le has dado la oportunidad de demostrarlo.
"La felicidad no depende de lo que nos falta, sino del buen uso que hacemos de lo que tenemos"
Reflexión: Con todo el dinero que tienes y lo único que me das es ésta Biblia
Un joven muchacho estaba a punto de graduarse, hacía muchos meses que admiraba un hermoso coche deportivo que vio en un concesionario.
Sabiendo que su padre podría comprárselo, le dijo que ese coche era todo lo que quería.
Conforme se acercaba el día de graduación, el joven esperaba por ver alguna señal de que su padre hubiese comprado el coche.
Finalmente, en la mañana del día de graduación, su padre le llamó a que fuera a su habitación y le dijo lo orgulloso que se sentía de tener un hijo tan bueno y lo mucho que le amaba.
El padre tenía en sus manos una hermosa caja de regalo. Curioso y de algún modo decepcionado, el joven abrió la caja y lo que encontró fue una hermosa Biblia de cubiertas de piel y con su nombre escrito con letras de oro.
Enojado le gritó a su padre diciendo: ¡ Con todo el dinero que tienes y lo único que me das es ésta Biblia !
Y salió de la casa. Fue tanta la decepción del joven que se fue de la casa a hacer su vida.
Pasaron muchos años y el joven se convirtió en un exitoso hombre de negocios.
Tenía una hermosa casa y una bonita familia, pero cuando supo que su padre ya era anciano estaba muy enfermo, pensó en visitarlo.
No lo había vuelto a ver desde el día de su graduación.
Antes que pudiera partir para verlo, recibió un telegrama donde decía que su padre había muerto y le había heredado todas sus posesiones, por lo cual necesitaba urgentemente ir a la casa de su padre para arreglar todos los trámites de inmediato.
Cuando llegó a la casa de su padre, una tristeza y arrepentimiento llenó su corazón.
De pronto, empezó a ver todos los documentos importantes que su padre tenía y encontró la Biblia que en aquella ocasión su padre le había dado.
Con lágrimas, la abrió y empezó a hojear sus páginas. Su padre cuidadosamente había subrayado un verso en Mateo 7:11:
"Y si vosotros siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, cuanto más nuestro Padre Celestial dará a sus hijos aquello que le pidan".
Mientras leía esas palabras, unas llaves de coche cayeron de la Biblia.
Tenía una tarjeta del concesionario de coches donde había visto ese coche deportivo que había deseado tanto.
En la tarjeta estaba la fecha del día de su graduación y las palabras:
Sabiendo que su padre podría comprárselo, le dijo que ese coche era todo lo que quería.
Conforme se acercaba el día de graduación, el joven esperaba por ver alguna señal de que su padre hubiese comprado el coche.
Finalmente, en la mañana del día de graduación, su padre le llamó a que fuera a su habitación y le dijo lo orgulloso que se sentía de tener un hijo tan bueno y lo mucho que le amaba.
El padre tenía en sus manos una hermosa caja de regalo. Curioso y de algún modo decepcionado, el joven abrió la caja y lo que encontró fue una hermosa Biblia de cubiertas de piel y con su nombre escrito con letras de oro.
Enojado le gritó a su padre diciendo: ¡ Con todo el dinero que tienes y lo único que me das es ésta Biblia !
Y salió de la casa. Fue tanta la decepción del joven que se fue de la casa a hacer su vida.
Pasaron muchos años y el joven se convirtió en un exitoso hombre de negocios.
Tenía una hermosa casa y una bonita familia, pero cuando supo que su padre ya era anciano estaba muy enfermo, pensó en visitarlo.
No lo había vuelto a ver desde el día de su graduación.
Antes que pudiera partir para verlo, recibió un telegrama donde decía que su padre había muerto y le había heredado todas sus posesiones, por lo cual necesitaba urgentemente ir a la casa de su padre para arreglar todos los trámites de inmediato.
Cuando llegó a la casa de su padre, una tristeza y arrepentimiento llenó su corazón.
De pronto, empezó a ver todos los documentos importantes que su padre tenía y encontró la Biblia que en aquella ocasión su padre le había dado.
Con lágrimas, la abrió y empezó a hojear sus páginas. Su padre cuidadosamente había subrayado un verso en Mateo 7:11:
"Y si vosotros siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, cuanto más nuestro Padre Celestial dará a sus hijos aquello que le pidan".
Mientras leía esas palabras, unas llaves de coche cayeron de la Biblia.
Tenía una tarjeta del concesionario de coches donde había visto ese coche deportivo que había deseado tanto.
En la tarjeta estaba la fecha del día de su graduación y las palabras:
Las cosas no siempre son lo que parecen
Dos ángeles viajeros pararon a pasar la noche en casa de una familia adinerada. La familia era déspota
y no los dejó que ocuparan la habitación de los invitados y los mandó al frío sótano en un pequeño lugar. Estaba preparándose para dormir en el piso, cuand el angel mayor vio un hoyo en la pared y se puso a repararlo.
Cuando el angel más joven le preguntó por qué lo hizo, el angel mayor le dijo,
"Las cosas no siempre son lo que parecen."
La noche siguiente los dos se fueron a descansar en la casa de una familia muy pobre, pero muy hospitalarios.
El campesino y su esposa, después de compartir sus alimentos, (muy pocos alimentos) la pareja les cedió su cama
para que descansaran mejor. Cuando el sol salió al siguiente día los ángeles encontraron a la pareja de
campesinos llorando. La única vaca que tenían y el único ingreso sólido que tenían la encontraron muerta en el campo.
El angel joven estaba furioso y le preguntó al angel mayor cómo es posible que permitieras esto?
El primer hombre lo tenía todo y aun así lo ayudaste, tapando el hoyo de la pared. Y esta familia que estuvo dispuesta a compartir todo con nosotros, y dejaste que su única vaca muriera?
Las cosas no son lo que parecen replicó el angel mayor.
Cuando nos quedamos en el sótano de la casa de la familia adinerada noté que dentro del hoyo había oro
guardado ahí en la pared. Y como estaban tan obsecionados con acumular riquezas y no querían
compartir su fortuna, por eso sellé la pared para que no lo encontraran. Y anoche cuando dormíamos
en la cama de los campesinos,el angel de la muerte vino a llevarse a la esposa del campesino. Y en
lugar de la esposa le dije que se llevara la vaca.
¿Ves como las cosas no siempre son lo que parecen?
Algunas veces es exactamente lo que pasa cuando las cosas no salen como queremos. Pero debemos entender
que Dios envia Angeles para que nos cuiden de situaciones dolorosas.
"Algunas personas llegan a nuestras vidas y se van, otras se convierten en amistades y se quedan por un
tiempo dejando sus huellas en nuestros corazones."